Posología
La dosis se ajustará a las necesidades individuales del paciente
Adultos
Para la fase de ajuste y la terapia de mantenimiento, se recomienda una dosis diaria total de 450 a 600 mg
dividida en dos o tres dosis diarias (1 comprimido de Rytmonorm 150 mg 3 veces al día o uno de
Rytmonorm 300 mg 2 veces al día) en pacientes que pesen alrededor de 70 kg. Ocasionalmente puede ser
necesario elevar la dosis diaria a 900 mg (2 comprimidos de Rytmonorm 150 mg 3 veces al día o 1
comprimido de Rytmonorm 300 mg tres veces al día). Esta dosis diaria sólo debe ser sobrepasada en casos
excepcionales y bajo estricto control cardiológico.
Para los pacientes con un peso corporal menor la dosis diaria debe reducirse de forma adecuada. Debe
iniciarse el tratamiento con una dosis baja, 150 mg dos veces al día, y debe valorarse cuidadosamente al
paciente, poniendo especial atención en la evidencia clínica y electrocardiográfica de toxicidad.
Los incrementos de la dosis no deben realizarse hasta que el paciente haya recibido tratamiento durante 3-4
días.
En aquellos pacientes en los que aparece una prolongación del complejo QRS o del intervalo QT corregido
para la frecuencia o bloqueo AV de segundo o tercer grado, se debe reducir la dosis o suspender la
administración hasta la normalización del ECG.
La dosis de mantenimiento individual debe determinarse bajo control cardiológico, incluyendo
monitorización electrocardiográfica y controles repetidos de la tensión arterial (fase de ajuste).
En pacientes con severo daño miocárdico previo, Rytmonorm, igual que otros antiarrítmicos, debe ser
administrado cuidadosamente, debe iniciarse la terapia con una dosis baja, 150 mg una vez al día, y debe
valorarse cuidadosamente al paciente, poniendo especial atención en la evidencia clínica y
electrocardiográfica de toxicidad. Se aplica lo mismo a la terapia de mantenimiento. Cualquier incremento
de la dosis que se requiera no debe acometerse hasta después de 5 a 8 días de terapia.
Población pediátrica
En niños, se ha probado que es apropiada una dosis diaria media de 10 a 20 mg de hidrocloruro de
propafenona por kilo de peso corporal, administrada en 3 a 4 dosis en la fase de ajuste de dosis y en el
tratamiento de mantenimiento.
Los incrementos de la dosis no deben realizarse hasta que el paciente haya recibido tratamiento durante 3-4
días.
La dosis de mantenimiento individual debe determinarse bajo control cardiológico, incluyendo
monitorización electrocardiográfica y controles repetidos de la tensión arterial (fase de ajuste).
Pacientes de edad avanzada
En pacientes de edad avanzada o en pacientes con disfunción ventricular izquierda relevante (fracción de
eyección menor del 35%) o enfermedad miocárdica estructural, el tratamiento debe iniciarse gradualmente,
con una precaución especial en incrementos pequeños de dosis, poniendo especial atención en la evidencia
clínica y electrocardiográfica de toxicidad. Lo mismo se aplica para el tratamiento de mantenimiento.
Cualquier incremento de dosis que pueda ser necesario, no debe llevarse a cabo hasta después de 5 a 8 días
de tratamiento.
Insuficiencia hepática o renal
En pacientes con insuficiencia hepática o renal, puede haber acumulación del fármaco tras la
administración de dosis terapéuticas estándar. Sin embargo, a los pacientes en estas condiciones se les
puede ajustar la dosis de hidrocloruro de propafenona con monitorización del ECG y de los niveles
plasmáticos.
Forma de administración
Debido al sabor amargo y al efecto anestésico superficial de la propafenona, los comprimidos deben
tragarse enteros (sin masticar) con un poco de líquido.